Emisiones al medio ambiente y camiones de segunda mano
La preocupación del sector del transporte por reducir su impacto medioambiental es una realidad, no en vano es el sector de mayor consumo energético y mayores emisiones de CO2, al menos en nuestro país. Teniendo especial relevancia el transporte por carretera.
No obstante y pese a su compromiso por reducir las emisiones de GEI (Gases de Efecto Invernadero) según un artículo publicado este mismo año por Eurostat en base a datos de la Agencia Europea de Medioambiente (EEA) y del que se ha hecho eco el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, las emisiones no se están reduciendo.
Las políticas que está implementando la Unión Europea buscan de frenar el impacto ambiental. Pero para lograr el objetivo de 0% de emisiones va a ser necesario endurecer las medidas ya que en este informe el transporte a nivel europeo es el peor parado de todos, al ser el único que ha aumentado en términos absolutos sus emisiones de GE en el período 1990-2020. Concretamente un 33,5%, lo equivalente a 241 millones de toneladas de CO2. Por tanto, la eficiencia del combustible no ha mejorado lo suficiente como para compensar el aumento en el volumen de transporte.
¿Qué hay de los camiones de segunda mano?
Hablamos de cambiones más antiguos y menos eficientes y su emisiones son mayores por lo que en la mayoría de los casos, el parque VO no contribuye a minimizar el impacto medioambiental.
Es cierto que se ha consolidado como el mayor reto para estos vehículos en un sector, que mide mucho los gastos operativos de su actividad, porque los márgenes son muy estrechos, por lo que está siendo complejo.
Pero la realidad es que en general el transporte está lejos de llegar a la media del resto de sectores económicos. Y esto es debido a que casi todo el combustible utilizado en el transporte procede de derivados del petróleo, y solo recientemente ha habido un cambio marginal hacia las energías renovables.
¿Cuál es el consumo de energía y emisiones al medio ambiente en el transporte por carretera?
En España y en gran parte de Europa, el transporte por carretera es dependiente casi en su totalidad de la energía que se produce por combustibles fósiles. Esto se debe a que su relación volumen/energía y sobre todo, su bajo precio frente a otros tipos de energía, la hacen atractiva y barata de usar.
Se estima que el transporte por carretera es el responsable de consumir más del 40% de la energía que España produce, lo que se traduce en que consume el 60% del petróleo que el país procesa.
Esto es alarmante, pues implica que el consumo de carburante en el país de habla hispana es de más de 11.000 millones de litros de gasolina y la cifra se duplica en torno a litros de gasóleo al año (es decir, más de 22.000 mil millones de litros). Estos datos hacen referencia sólo al sector del transporte por carretera.
¿Qué se está haciendo al respecto?
Toda Europa está desarrollando e implementado fuentes alternativas de energía que permita así crear vehículos que empleen combustibles que no sean derivados del petróleo, esto con una sola finalidad: evitar la dependencia que se tiene con este combustible fósil y reducir las emisiones de CO2.
De todas las opciones, se habla de los biocarburantes, que son energías renovables, principalmente el bio diésel y el bioetanol. ¿Y tú qué opinas al respecto? ¿Crees que estás medidas son suficientes? ¿O eres de los que opinas que estamos muy lejos de conseguir el objetivo de reducir las emisiones de C02?